Blogia
Pequeña

El problema

El problema

A veces el problema es el amor; otras veces, el desamor. Y otras, las ganas. Muchas otras veces el problema es no saber controlar el timón que dirige tu vida, otras veces el problema es perderte y no saber volver. El problema en ocasiones es depender de alguien, pero es mucho peor querer depender. El problema puede ser la fragilidad que mimamos porque creemos que nos servirá de mucho y en realidad, no nos sirve de tanto. El problema otras veces es que decidimos gastar el tiempo en soñar y no lo empleamos para vivir, ni para enfrentarnos a la realidad que no queremos asumir. Y ese es otro de los problemas, el negarnos a vivir algo que sí nos toca vivir.

Pero de entre todos los problemas, creo que el peor de todos es el desamor, y también el amor, cuando no lo tienes. Y amar sin medidas, o incondicionalmente. Eso te vacía por dentro y en ocasiones dejas de ser tú y no puedes reconocerte porque lo has dado todo y ya no te queda nada. Y el problema a veces es arrepentirse, tanto de las cosas que hiciste como de las que no llegaste a hacer. El problema es no plantearse el ser feliz aunque no conserves el amor que tanto te hace falta, o aunque no tengas lo que esperabas y te merecías en ese momento. El problema es dar más de lo que recibes, y quedarte con las manos vacías, y con el corazón roto. Con demasiadas heridas abiertas,  y demasiados recuerdos vagando. El problema es querer olvidar o recordar, y no decidirte, porque no sabes bien qué hacer. El problema es dudar, y tambalear hasta caer. El problema es no confiar en ti misma y no dar ese paso que hace falta dar. El problema radica en el amor, a raíz de él todo nace. Y el problema es que el amor también cambie, y se produzca ese paso del amor al odio. Y entonces la vida cambia y los problemas crecen, y permanecen. Pero podemos solucionarlos, no con fuerza, sino con confianza, con confianza en todo lo que te rodea. El problema es perder el norte, y no saber guiarte de ninguna de las maneras porque algo o todo te falta, y no puedes encontrarlo, porque ni siquiera tienes una ligera intuición de donde estará eso que te es imprescindible.

El problema es conocer todos y cada uno de tus problemas, y no encontrar la fórmula mágica para solucionarlos. Pero he decidido hacer algo: no amar sin medidas, no amar tan incondicionalmente, no darlo todo a la primera de cambio, no tener más de 3 sueños cada noche, y sonreír 10 veces al día. He decidido mimar mi piel y no otra. He decidido cuidar mis labios para no tener que empezar a depender de otros. He decidido la vida. Los colores. Y al otro lado está la pasión, otro gran problema cuando se ausenta. Cuando deja de estar porque no puede estar, o porque simplemente te han hecho daño y no quieres recordarla. Y quieres tenerla lejos.

Y el amor por precioso que sea, siempre hace de las suyas.

2 comentarios

Grecy -

Realmente me identifiqué con este artículo, siento que fue hecho para mí, me encantó
Grecy ^_^

Alex -

Que razón tienes, cuando dices que a veces gastamos el tiempo en soñar y no lo empleamos en vivir, ni para enfrentarnos a la realidad que no queremos asumir......
El DESAMOR, no creo que sea un problema.....vale, es una putada....pero tambien nos prepara, para el siguiente amor......Es como una etapa más en tu vida, por la que necesariamente tienes que pasar...
Besinos, Laura.