Blogia
Pequeña

De memoria

Lejos. Muy lejos. Tan lejos que apenas me ves. Y pequeña. Mi sombra quiere dejar de existir. Mis brazos no quieres moverse. Mis manos quieren quedarse quietas pero mis dedos quieren tener vida propia. Quiero palabras, pero no sé cuáles exactamente. No sé cuáles son las que mejor me hacen sentir: compañía, calor, abrazo, sol... No sé qué es lo que necesito ahora. Tampoco sé lo que necesita mi vida en estos momentos. Vuelvo a estar lejos. Vuelves a no querer encontrarme, pero he estado delante tuya. Y pequeña, hoy más pequeña que ayer. No sé si más que mañana. No sé si quiero saberlo. Si me hace falta. Mi cuerpo descansa y mis sueños me acompañan esta vez. No me escapo de mi vida, sueño con ella y con las cosas que la componen todos los días. Y todas las noches quiero conciliar temprano el sueño. No quiero minutos para pensar. No quiero minutos para recordar. No quiero imágenes, no las quiero. Quiero tiempo libre, quiero mis palabras, dejé pasar demasiado tiempo para leer las tuyas y las tuyas no llegaron. Y el tiempo ha seguido pasando y tú has provocado los cambios, los cambios de los estados... No quiero quedarme aquí. Quiero volar lejos. No puedo. Nunca puedo. Me lleno de impotencia y vuelvo a estar lejos. Tan lejos que ni siquiera yo quiero verme. Me sé de memoria donde existen todos y cada uno de los lunares que pueblan mi cuerpo. Me sé de memoria como son mis labios, y mi nariz, y mi frente. Me sé de memoria cuanto miden mis piernas, y mis pies. Me sé de memoria el tamaño de mis tobillos y mis muñecas. Tú también lo sabías. Al menos te aferraste a mí más de una vez para hacerme tuya. Ahora creo que te equivocaste. Que yo no te hacía falta. De lo contrario, no hubieras dado todo por acabado. O no hubieras establecido esta pausa estúpida. Idiota. Es así también como me he ido sintiendo y siento (todavía). Sí, todavía. Y me sé de memoria este sentimiento porque lleva conviviendo conmigo muchas semanas. Semanas que no se me olvidan porque se han convertido en eternas. Siempre me acompañarán. Pesarán más que todas las semanas anteriores. Y tu silencio pesará más que tu voz. Y dentro de poco se me olvidará como era. No quiero esforzarme en recordar porque de nada me sirve ya. Y creo que si estuvieras aquí, dentro de mi mente, lo sabrías. Pero te doy la oportunidad de estarlo, de estar ahí, en mi mente. Ahora mismo, si te encuentras leyendo esto, es que te encuentras dentro mío también. Estas palabras definen completamente de qué estoy hecha.

Tristeza. Pena. Amargura. Decepción. Desolación. Rabia. Impotencia. Más tristeza. Y más pena. Me sé también, de memoria, estos sentimientos; y creo que ni siquiera puedo cambiar esto. Poco a poco. Tal vez. Sin ti. Porque no apareces, y no puedo dibujarte enfrente mío. No quiero imaginarte. No quiero pensar como llevarás hoy el pelo o qué sonrisa llevarás puesta. No quiero porque hasta eso me hace daño y más daño me hago al pensar que tú no piensas en mí. No quiero ya intentar manejar tus pensamientos, y hacer que pienses en mí. Con un pensamiento no puedo reconstruir ese mundo que hace tiempo quedó roto. Con un pensamiento más, en tu vida, hacia mí, tampoco puedo cambiar estas sensaciones que me inundan ininterrupidamente. No puedo cambiarte, ni quiero. No puedo con un pensamiento más, creer que me has amado tan férreamente como un día, cualquiera, pero feliz...me hiciste creer.

2 comentarios

laura -

No debes compadecerte, claro que no. Solo escribo palabras sinceras, y no puedo obviar como me siento. Todos los dias son iguales, y la desilusion no se desvanece, razón por la cual no puedo escribir, aparentando que soy la persona mas feliz de este mundo. Ni mucho menos quiero comentarios compadecientes, me bastan las palabras. Solo eso.
Y si, las tias a veces somos raritas, pero los tios tambien. A veces creo que es mejor dejar que se enamoren de ti primero,y despues, si te apetece, enamorarte tú. Es la unica manera de no hacerte tanto tanto daño.
Y me siento afortunada por haber amado y haber sido amada, eso no te lo rebato. Es bonito el amor cuando te empuja a vivir, del otro tipo de empujón, ya he hablado bastante.
Besines castellonenses

Alex -

....Si me lo permites, Laura,no pienso compadecerme de tu estado emocional....
Todo lo contrario, si pudiera, te tiraria de las orejas o te peñizcaria, para que espabiles y no te rindas.......
Si lo piensas bien,eres muy afortunada, por conocer el amor..aunque te supiera a poco..(muchas personas en todo el mundo, posiblemente, nunca lo lleguen a conocer).
Ahora, sabes que puedes amar y ser amada.....y ,todo lo que eres capaz de hacer una vez,lo puedes seguir haciendo y perfeccionando, con el paso del tiempo....
Ademas, Laura, te voy a confesar un secreto.......
Los tios, somos muy raros...
Cuando sabemos que una mujer está loca por nosotros....
perdemos interes en ella....Si, lo sé....somos gilipollas......en cambio, perdemos el culo, por la tonta, que no nos hace ni puto caso.....
Aunque todo esto ya lo sabrias, pues es un "secreto a voces"...jeje...
Bueno, si eso....no me hagas mucho caso....siempre es mas facil dar consejos, que aplicarse el cuento.....
Besinos, Lady Laura.