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Pequeña

Te lo prometo

Hoy he vuelto a pensar en ti, ha sonado la canción a las once de la mañana. Me estaba cambiando, poniendo el vestido rojo de vuelo sobre los vaqueros. Creo que hoy ha sido uno de los pocos días en los que no he llorado al escuchar esa canción. Siempre me recordará a ti, y siempre me recordará solamente a ti. Es algo que no puedo evitar. Sé que si no hubiera pasado lo que pasó, también me recordaría a ti, pero no lloraría, evidentemente. Sólo han pasado cuatro años, pero son suficientes para seguir pensando en que podría seguir viéndote, admirando tu sonrisa, admirando el color oscuro de tus ojos. Ahora no puedo, y eso me sigue matando por dentro, pero puedo respirar. Al principio no podía, las ojeras dominaban mi rostro, haciendo de mí una persona tremendamente triste, por eso no es difícil que la tristeza se anide en mis hombros y mis días cambien de color en cuestión de tres segundos y medio, por eso creo que te sigo echando en falta, sé que si te tuviera presente, todo cambiaría, al menos lo suficiente como para seguir confiando algo más en la vida. Sé que de ninguna manera hubiera podido ser feliz a tu lado. No confío en los milagros, tampoco en las rachas de buena suerte, tampoco en mí, almenos en esa época. Ha habido otras en las que me he querido más, ahora estoy haciendo todo por intentarlo. He estado a punto de llorar al escuchar el estribillo, (otra de las muchas cosas que no puedo evitar), pero he sido fuerte. Es como si apretando fuerte fuerte los ojos lo consiguiera, y todo fuera más fácil. No me siento totalmente segura, sobre todo porque momentos como éstos en épocas como estás, la vulnerabilidad no tiene compasión. Se agarra, se anuda fuertemente a mi cuello y me amenaza con no soltarse si yo no hago nada por pintarme los días de color azul. Creo que me acaba dejando señales, y no se borran hasta que llega la primavera. Creo que temo la cantidad de vulnerabilidad que me supera. Creo que temo seguir echándote de menos, o que pasen veinte años y siga recordándote con una sonrisa bajorrelieve, y con los ojos brillando de pena. Temo eso, y temo que vuelva a vivir algo así, algo muy similar. Sé que no podría soportarlo, no por falta de seguridad o carencia de energía, sino porque hay cosas en la vida que no deben repetirse; al menos para no convertirte en alguien demasiado frágil. Y quiero deshacerme de la fragilidad. Pero eso no es ningún secreto. El secreto verdadero es el que guardo dentro mío y que lleva tu nombre. Y mi imagen clavada en un rinconcito de mi memoria que se activa rápidamente cuando esa voz empieza a sonar y se cuela en mi casa. Y no hago nada por escucharla voluntariamente. Creo que pasaré muchos años pensando en ti, y voy a mantener tu recuerdo vivo y bello. Te lo prometo.

Te lo prometo.

3 comentarios

Alex -

Eres tan sensible...
Tan puñeteramente sentimental..
Tan fragil a veces, otras tan fuerte..Eres Laura.
....La Niña Sol, aparece en los dias azules y cálidos...
....Pequeña Scarlett, siempre está presente, pero últimamente menos triste y más realista....de lo cual me alegro...
¿Puedo darte un beso muy gordo?....porfa...MUACKSSSS

laura -

gracias maria, por dejar tus palabras aqui.
la gente que me lee y me deja comentarios, sabe que me animan mucho y me empuja a escribir más...
gracias de nuevo..

Maria -

Me gusta leer lo que escribes

Te admiro desde el anonimato!