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Pequeña

Nuevo miedo, y primeros puntos

Hoy he sentido una clase de miedo por 1ª vez: las operaciones. Se trataba sólo de que me extirparan dos pequeños apéndices benignos; pero mentiría si no dijera que he sentido miedo. Mucho. Y frío, también. Las piernas comienzan a temblarte de la manera más tonta, y siguen así hasta que logras dominarlas, y cruzarlas o hacer cualquier cosa para que puedan devolverte la paz que tenías antes de entrar en el hospital. Después, el inmenso dolor de las agujas, que se introducen dentro de ti para calmarte el dolor más fuerte que podrías sentir si te operaran sin anestesia; pero creo que las anestesias son insuficientes, o al menos, para mí, hasta con anestesia he sentido molestias; se deberá, quizá, a que desde siempre he sido cabezota  y no he querido desviarme mucho de este mundo, el real, donde todo duele. Y es que me quedo antes con el dolor, que con el miedo.

Al miedo no puedo soportarle. Me es imposible. Y no puedo hacer nada. Tampoco me propongo ningún plan, sé que no conseguiría nada. Somos incompatibles. Jamás le supero.

Y te ves envuelta entre paredes blancas, y también entre lágrimas que te salen por dolor, por nervios...y luego las risas, que le preceden al llanto y es ahí cuando la doctora se asombra del llanto mezclado con la risa, pero la risa pronto fenece; y vuelve a nacer el llanto, y de repente te sientes pequeña, casi bebé. Y piensas no ya en ti o en el dolor que sientes en ese momento, sino en como estaran las personas que te esperan fuera.

Gracias mamá, por preocuparte, por sentir tuyo mi dolor, por tus paseos y vueltas en el pasillo y porque mi dolor te traspasa, te llega al alma y a los ojos. Hoy lo he notado. Sin palabras, otra muestra de amor incondicional. Gracias Pablo, por estar a mi lado y preocuparte tanto por mí. Porque simplemente eres tú. Eres así. Y puedo llegar al final del camino y de tu mano porque sé que nunca me pierdo. Y Celia, que se preocupa de la manera más sincera, y me hace llegar sus palabras. Me has transmitido paz. Muchísima.

Hoy he vuelto a sentir miedo. Otro tipo de miedo, pero era miedo. Siempre está ahí. Y no sé como alejarme de él.

Hoy me quedo en casa, esperando calor, y mimos. Hoy vuelvo a ser pequeña (casi bebé)

Y asustada, vuelvo a la vida, a ésta que te da y devuelve patadas de la manera más intensa. Ésta en la que las anestesias no funcionan de nada.

Y mi cuerpo, a partir de hoy, comienza a llevar 6 puntos.

1 comentario

Alex -

Hola Princesa, lo primero desearte,que te recuperes pronto...de todo corazón...
Está claro, que eres una chica muy sensible, por eso sientes mucho mas las cosas que te pasan y sufres mas de lo normal.....Eres otra "puñetera sentimental", como yo.....pero hay una gran diferencia entre los dos.....la edad, que te va "curtiendo" la piel y el corazón y terminas aprendiendo a defenderte de esos ataques emocionales.....
Ahora tienes más cicatrices...la que te hicieron en el corazón, por haber amado sin reservas y la que te hizo el cirujano....Para la cicatriz del corazón, no tengo cura, para la cicatriz de la piel, si que tengo solución....Si no te lo ha dicho el Cirujano, que sepas que hay unos apósitos de poliuretano (Trofolastín Reductor de Cicatrices)...la cicatriz quedará mas disimulada.....Bueno ,lo siento por el rollo.....
Besinos y esta vez mimos, pero no te acostumbres,xDDDD, solo porque estás malita...¿ok?