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Pequeña

Te persigo

Te persigo. Y no te puedo alcanzar. No puedo porque vas demasiado deprisa y ni siquiera diviso las huellas de tus pies. Ni siquiera diviso tu espalda a lo lejos, porque no, no puedo alcanzarte. No puedo correr más, no puedo avanzar más rápido. No puedo quedarme quieta ya, porque he gastado demasiadas fuerzas y ya he comenzado este viaje. Por eso te persigo. Pero sé que no me quedan muchas más fuerzas. Porque en tantas otras ocasiones te perseguí y te alcancé y pude decirte al oído todas esas frases que escribí en mis pequeñas hojas...y pudiste escucharlas, y pudiste notar mi voz. Pudiste rozar los poros de mi piel y acariciar mi nariz. Y pudiste notar mi amor. Pero a veces las personas nos sacan demasiada ventaja, y otras se quedan ancladas en un momento, en un día, y no quieren ver más... Yo quise hacer eso, y quedarme quita, pero decidí seguirte, y decidí ir detrás tuyo porque pensé que ese era el camino. Pensé que así sería feliz. Y te persigo. Y no aprendo, y sigo detrás tuyo. Sigo anudada a tu espalda, aunque no físicamente, puesto que...sigo sin divisar tu espalda...esa a la que tanto me abracé cuando mas temía, y más me ahogaba... Te persigo porque quiero salvarme, porque no quiero ahogarme más. Porque no podría soportarlo otra vez. Te persigo con la esperanza de encontrarte en la próxima estación, en la próxima piedra, en el proximo descanso, ...y en cualquier cosa o lugar próximo, aunque sea el último Necesito encontrarte, y decirte las frases que se quedaron sin decir. Necesito que sepas lo mucho que te necesito, y también necesito que me necesites. Pero ante todo, necesito que tus pies decidan quedarse quietos durante un instante, solo si ellos deciden hacerlo, solo si me das un respiro...podré coger la ultima bocanada de aire, y correr...hacia ti, y por ti, o por mí...ya no lo sé. Perdí la cuenta de todos los motivos por los que empecé a correr, por los que empecé a saltar piedras y evitar bordillos... pero es lo único que hallo a cada momento, piedras y bordillos...porque tú saltas mas alto, y tu andas mas rapido... y sigo sin encontrarte, sigo sin divisarte... Ojalá mañana los bordillos sean mas bajos y las piedras mas pequeñas y tus piernas esten cansadas y las mias llenas de fuerza. Ojalá pueda hablarte, ojalá pueda decirte lo que aquella vez se me olvidó. Ojalá no te olvides que estoy aquí...detrás tuyo. Justamente detrás tuyo.

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